Cuando en el año 2017 Alfaguara publicó La novia gitana de la mano de una desconocida Carmen Mola, el mundo editorial empezó a rumorear sobre la identidad de quién se escondía tras ese seudónimo. A su primer thriller superventas le siguieron La red púrpura, La nena y Las madres. En 2021 cuando obtuvo el Premio Planeta de Novela con La Bestia, se desveló oficialmente la identidad, que en este caso era una (casi divina) trinidad: Jorge Díaz, Agustín Martínez y Antonio Mercero, guionistas y novelistas que, tras varios años colaborando juntos en el medio audiovisual, decidieron unir esfuerzos para escribir novelas de suspense y crímenes.
Ahora presentan El infierno, una nueva historia que contiene todos los argumentos marca de la casa: un argumento trepidante, crímenes perturbadores, una detallada recreación histórica y social, personajes muy bien trazados y, en este caso, un guiño a la Divina comedia del florentino Dante Alighieri, cuyos círculos del infierno inspiran el misterioso relato incluido en la trama principal.
La historia arranca en Madrid. La capital española vive la efervescencia del enfrentamiento entre los partidarios del general Juan Prim y los de la reina Isabel II. La ciudad esconde la labor de los conspiradores que ansían derribar la monarquía bajo los partidos progresista y democrático, cuando la violencia ha tomado las calles. Un espeluznante levantamiento del ejército contra la reina Isabel II tiñe de sangre y muertos las calles de Madrid. El pueblo lo llama la sargentada y el horror campa por toda la ciudad. En medio de los cañonazos y los disparos, una bailarina llamada Leonor y un joven estudiante de Medicina de nombre Mauro se ven envueltos en un homicidio involuntario que marcará sus vidas.
Huyendo de la prisión o la muerte, Leonor se ve obligada a aceptar la propuesta de matrimonio de un millonario hacendado cubano con el que huye a La Habana, pero, cuando llega allí, este maravilloso enclave del Caribe no es lo que espera. Las plantaciones de azúcar y los ingenios esconden la tragedia de un esclavismo aún muy vivo. Y, entre los esclavos, la figura de Mauro sorprende a la muchacha. En un intento desesperado por escapar de ese infierno, ambos descubrirán que el ingenio donde se encuentran oculta una trágica conspiración cuyo resultado es la aparición de acaudalados terratenientes asesinados siguiendo un rito ancestral africano brutalmente feroz. Lejos de la Península, Carmen Mola evoca con una fidelidad asombrosa la atmósfera de la Cuba colonial, sus gentes, las costumbres y el choque cultural entre sus habitantes. La isla, todavía perteneciente a España, está plagada de hacendados que se han hecho ricos gracias al trabajo de los esclavos en sus plantaciones de azúcar. Así, se relata cómo eran los ingenios, vastas explotaciones rodeadas de kilómetros de selva en las que trabajaban centenares de esclavos africanos, españoles y chinos en condiciones penosas, además de las fiestas que se celebraban en las lujosas fincas de los hacendados de origen español y la forma de vida de los esclavos que lograban escapar y se establecían en asentamientos sin apenas recursos.
La tensión narrativa, que se hace palpable desde el comienzo de El Infierno, se mantiene constante en un relato que describe la gran historia de amor entre sus dos protagonistas, una atracción que el alma herida de ella intenta negar, pero que enardece el corazón de él, una relación aparentemente imposible debido a las circunstancias de ambos.
Salvaje, cruel y dantesco. Carmen Mola enriquece su universo literario retratando de nuevo la maldad y la violencia, y aderezándolo con múltiples géneros como la novela gótica de terror, los relatos de aventuras, la crónica y la crítica social y la historia de amor.
EL INFIERNO
Carmen Mola
Planeta, 480 pp., 22,90
L´INFERN
Columna,
traducción de Núria Parés Sellarès y
Núria Garcia Caldés, 496 pp., 22,90 €