La escritura, el pensamiento y el caminar son, para Rafael Argullol, actos profundamente entrelazados que estructuran tanto su vida como su obra. En su visión, el cuerpo humano no es solo un instrumento del pensamiento, sino un componente esencial del mismo, y la escritura es una extensión física de este proceso. Argullol, fiel a su estilo artesanal, escribe a mano, creando un vínculo íntimo entre su cuerpo, la palabra y el papel, reflejando una resistencia deliberada frente a la inmaterialidad de lo digital. Este gesto se conecta con la idea de que las palabras, al ser plasmadas en un medio tangible, adquieren una profundidad y una textura que se pierde en lo virtual.
En su exploración creativa, Argullol busca integrar las dimensiones físicas y espirituales del ser humano. Su escritura refleja esta intención, con obras como Visión desde el fondo del mar, Poema y Danza humana, que no solo se destacan por su magnitud, sino también por su capacidad de desbordar los límites tradicionales de los géneros literarios. Estas obras monumentales manifiestan una visión transversal, en la que prosa, poesía y ensayo conviven, formando un paisaje literario único que invita al lector a participar activamente en el acto de descubrir.
El libro que acaba de publicar Acantilado, Caminar, pensar, escribir aspira a iluminar la obra de Rafael Argullol desde múltiples perspectivas. Inspirado en colecciones clásicas como los Cahiers de l’Herne, este volumen se propone ofrecer una visión integral del autor, su vida y su pensamiento. Reúne voces diversas: estudiosos, amigos y compañeros de viaje intelectual, quienes abordan distintos aspectos de su obra, explorando temas como el nomadismo, la aventura, el fin del mundo, el mal, el erotismo y la autobiografía. Esta estructura temática refleja la naturaleza transversal de la escritura de Argullol, permitiendo a los lectores orientarse en su universo creativo y, al mismo tiempo, descubrir nuevas conexiones entre sus textos.
La relación entre vida y obra es un eje fundamental en este libro. Aunque Argullol ha mantenido una distancia consciente entre su yo interior y su yo exterior, la recopilación de testimonios y reflexiones personales enriquece nuestra comprensión de su personalidad. Este enfoque, que combina elementos autobiográficos con análisis literario, es especialmente significativo porque se produce durante la vida del autor, lo que permite capturar matices y detalles que de otro modo podrían perderse con el tiempo.
La amistad emerge como un hilo conductor en este volumen. Muchos de los colaboradores son amigos cercanos de Argullol, y sus escritos reflejan no solo una admiración intelectual, sino también un profundo respeto y afecto personal. Como señala el propio autor en sus textos sobre la amistad, esta se define por su capacidad de trascender el tiempo, consolidándose y fortaleciéndose a través de los años. Este sentimiento se traduce en los ensayos y reflexiones del libro, donde la simpatía y la conexión emocional coexisten con el rigor académico.
En última instancia, «Caminar, pensar, escribir» no es solo un homenaje a Rafael Argullol, sino también una invitación a explorar su obra desde una perspectiva más amplia y enriquecedora. Editado por Victoria Cirlot, Tamara Djermanovic y Estela Ocampo y coordinado por Oriol Alonso Cano, más allá de las categorías literarias, el libro destaca por su capacidad de conectar las experiencias de vida del autor con los temas universales que atraviesan su escritura. Así, cada lector puede encontrar en estas páginas un punto de partida para profundizar en la obra de Argullol y, al mismo tiempo, reflexionar sobre su propia relación con la escritura, el pensamiento y el acto de caminar como formas de conocimiento y creación.
Este volumen, concebido como un testimonio vivo, también incluye un valioso compendio de imágenes y anécdotas que enriquecen la experiencia del lector. Desde retratos hasta memorias compartidas, estas adiciones nos permiten vislumbrar facetas desconocidas de Argullol, conectando su obra con el ser humano detrás de las palabras. Como afirmaba Erasmo, la cultura es una función de la amistad, y este libro se convierte en un claro ejemplo de cómo las relaciones humanas pueden ser el motor de una exploración intelectual y artística más profunda.
En un mundo donde la inmediatez y la superficialidad parecen dominar, Rafael Argullol nos recuerda la importancia de la pausa, la reflexión y el compromiso con el pensamiento profundo. Su obra, y el libro que ahora se presenta, nos invitan a caminar junto a él, a pensar con él y, en última instancia, a descubrir en la escritura un camino hacia nosotros mismos. Quienes aún no conozcan su literatura, este volumen constituye una excelente guía de lectura mediante la que iniciarse en los temas en torno a los que ha merodeado una y otra vez el autor y para quienes ya la conocen es una excelente ocasión de releer con perspectiva y apreciar hasta qué punto las inquietudes del filósofo los siguen interpelando.
EL AUTOR: Rafael Argullol ha escrito treinta y cinco libros, entre los que se cuentan novelas, ensayos y poemarios. Además, ha intervenido en diversos proyectos teatrales y cinematográficos. Como profesor, ha enseñado en universidades europeas y estadounidenses. Colaborador habitual en diarios y revistas, con frecuencia ha vinculado su faceta de viajero y su estética literaria. Ha sido galardonado con el Premio Nadal en 1993 por La razón del mal, el Premio de Ensayo Casa de América en 2002 por Una educación sensorial, los premios Cálamo y Ciutat de Barcelona en 2010 por Visión desde el fondo del mar y el Observatorio Achtall de Ensayo en 2015. Acantilado ha emprendido la publicación de toda su obra.
Rafael Argullol: caminar, pensar, escribir
Acantilado, edición de Victoria Cirlot, Tamara Djermanovic y Estela Ocampo, coordinación de Oriol Alonso Cano, 432 pp., 26 €